En los próximos meses se
iniciará un periodo de recuperación para lograr bajos costos con balances
sólidos y capacidad de adquisición en las actividades mineras, así lo precisan
los estudios y proyecciones de BTG Pactual.
Para este año se estima que
los precios de los metales por debajo de los niveles del 2014, lo cual
conllevará a costos de operaciones racionalizadas, un ambiente más hostil para
desarrollar nuevas explotaciones e inversiones focalizadas en el mantenimiento
y mejoras de proyectos ya existentes. También, la inversión en nuevos proyectos
sería bastante por debajo de las inversiones que anticiparon, cuando el precio
del oro se ubicaba sobre US$ 1500 la onza.
En relación al 2013, el
mercado de los metales preciosos experimentó un año difícil, lo que se
evidencia con los precios del oro y de la plata que cerrarían en el 2014,
registrando caídas promedio del 10% y 18%, respectivamente. Este hecho se debe
principalmente al fortalecimiento del dólar, la solidez de la economía
estadounidense y el retiro del estímulo monetario de la Reserva Federal. De
esta forma, estos metales terminarían en valores de US$ 1270/Oz (Au) y US$
19.70/Oz (Ag); esos niveles que se asemejan a las del 2010, aún son distantes
del promedio obtenido en seis ciclos (equivalente a treinta años) durante los
que el oro promedio US$592/Oz y la plata, US$9.58/Oz.
De otro lado, las
valorizaciones de las compañías mineras se ven perjudicadas por productos de
sus costos mayores, pues estas reducen las utilidades de las empresas
proporcionalmente más que los precios de los metales. Un segundo efecto se da
por revisiones que sufrieron las carteras de producción física. Así, el índice
accionario que sigue los metales preciosos (S&P y TSX) cerraría este año
con un retroceso de 10.5%.
LAS CONSECUENCIAS:
Durante el año precedente,
muchas compañías mineras anunciaron su importante esfuerzo en el control de
costos operaciones consistente en racionalizar sus explotaciones e incluso en
cerrar algunas de ellas. Asimismo, la tendencia a preservar el capital
financiero implico revisar o cancelar distintos proyectos que aún estaban en
etapa inicial de estudio o exploración. Muchos de esos recortes se dieron en
jurisdicciones donde no sólo los costos operativos eran altos, sino también los
factores geopolíticos hacían la operación insostenible.
Por otro lado, la percepción
hacia la industria minera se ha mantenido en niveles negativos, habiéndose
incrementado aún más en noviembre del 2014, por la caída agresiva en el precio
de los metales preciosos; a ello se agrega la aprobación medioambiental
utilizada con fines políticos en las distintas jurisdicciones a nivel continental.
Esos factores aumentan los costos de capital, logrando en algunos casos
paralizar las operaciones y/o inversiones en el desarrollo de un proyecto. De
ese modo, el factor social y la relación con las comunidades se vuelven
factores cruciales en la inversión en el sector.
LAS PROYECCIONES DEL 2015:
Bajo este contexto, la
inversión en acciones dependerá de la proyección para el precio de los metales,
en la cual se ve tres posibles escenarios:
I. Precios a la baja:
Para los inversionistas – lo
más conveniente –, será ser selectivo en el sector con portafolios mixtos
(metales con exposición a los básicos, como el cobre o el zinc). Con precios
estables se privilegiarán las compañías con carteras de minas de bajo costo y
alta generación de caja;
II. Precios en alza:
En este caso se otorgaría
mayor ponderación a las compañías con minas de costos más altos que vean un
mayor aumento porcentual en su utilidad gracias al aumento de los precios y el
sector de las mineras junior.
Estudios de BTG Pactual
pronostican un primer escenario con precios de US$1,200/Oz (Au) y US$18/Oz (Ag)
en el 2015, y un segundo escenario de US$1,200/Oz (Au) y US$18.50/Oz (Ag)
durante el 2016, que corresponde al segundo escenario. De esta forma se apuesta
por compañías con operaciones de bajo costo y balances sólidos cuya capacidad
sea de aprovechar las oportunidades de adquisiciones que aparecen cuando los
precios de los metales están más débiles y cuando los competidores menos
eficientes tienen menor disponibilidad de recursos para desarrollar proyectos.
III. Menor riesgo político:
En Latinoamérica se
privilegian las grandes operaciones en jurisdicciones con el menor riesgo
político posible (un activo que es cada vez más escaso). En este punto, BTG
Pactual recomienda poner especial énfasis a los cambios sobre la percepción del
sector, factor fundamental cuando se determinan los precios de las acciones
ligadas a la minería dentro de la región.
FUENTE: BTG
Pactual, Kitco